Líneas Editoriales:
Pocos Cambios...
A estas alturas y a nuestras edades, esperábamos estar haciendo algo por el pueblo. Lo que no esperábamos es que algunos de nosotros tomen otros rumbos... Amigos de siempre y otros no tanto que ya ni te saludan... Algunos otros de nosotros chupando media a tutiplén... Algunos, la mayoría, sonriendo mientras trabajan callados y ven crecer la familia...Habrá que entender que ya no somos los mismos... Que la prisa por la 4 x 4 no nos permite mirar para el costado... Seguramente estamos más estresados que antes... Todo es plata. Si tenés sos... Si no tenés te jodés... No importa quién sos, ni de donde venís, ni que canciones acunaron tus sueños... No ... Pero no puedo evitar verte al lado mío subido en la higuera enfrente de la casa de Juancito, cuidando que no me cayera, porque sabías que era el más chico... Como te admiré entonces... Tan grande... Tenías 12 y yo 7.El otro día te miraba arriba de tus títulos y tus logros... Y ya ni te conozco... Pero debo reconocer que estoy esperando todo el tiempo ver ese brillo en el fondo de tus ojos... El mismo brillo que tenían cuando robábamos las primeras cerezas silvestres...De todos modos la vida nos enseña a cada rato y yo tengo algo que darte, claro que es muy humilde, pero de todos modos me voy a quedar por acá a ver si no te caes de una “rama”... Para darte una mano... Para que entiendas que hay cosas que cambian poco...Por eso digo que pocos cambios estamos gestando... Pensar que si nos esforzamos un poco, nada más que un poco, nuestros hijos tal vez puedan compartir alguna que otra siesta en una higuera...
